lunes, 3 de marzo de 2014

Maratón Sevilla 2014 "Yo tendría que haber estado ahí"


Me enfrento a la pantalla en blanco sin saber muy bien qué expresar, aunque tengo claro que necesito transmitir cierta desazón.
El pasado domingo 23 de febrero, estuve de nuevo animando a las personas que corrían en el maratón de Sevilla, es la quinta vez consecutiva que lo hago. En otras lo hice porque corría mi hermano y ahora porque lo hacen compañeros y compañeras de mi club. En esta ocasión no quise estar ni en la salida y en la llegada, son dos momentos de tensión y emoción que ya no quiero seguir viviendo en segunda persona. Cuando lo haga tendrá que ser en primera, ese es el problema y la sensación agridulce del pasado domingo. Por una parte disfruté animando, pero por otra sentí el peso de no haber estado ahí por primera vez corriéndola. "Yo tendría que estar ahí" me decía. La lesión tras la Turdetania (a la postre una prueba mal elegida) y el desanimo posterior me situó en una posición anímica y física imposible para preparar la Maratón de Sevilla, que llevaba soñando en hacerla varios años.
Dejé el coche cerca del puente del Alamillo y fui andando hasta el kilómetro 13 allí fue mi primera posición, en realidad no tiene mucho sentido animar ahí los corredores van lo suficientemente animados como para necesitar extra, se les notaba. Por allí vi pasar uno a uno a los compañeros del club. Cuando pasaron casi todos, dejé aquel puesto y me fui al 19 en la avenida Kansas City, mucho más ancho y donde pude correr unos metros con diversos corredores dándoles apoyo. El ambiente era fabuloso y yo me decía "Yo tendría que estar ahí". Finalmente marché hasta el 39 donde allí los ánimos eran mucho más efectivos, cuando pasó mi cuñado (terminó en 3:37) puse fin a mi tortura, el sufrimiento de los corredores y sus caras de desaliento pensando en su objetivo final, acrecentaba el mío por no haber llegado a disputar aquella prueba.
Después leí las crónicas de Floren, la Pingüina Veloz o Isidro Gilabert e imaginé la mía; se afianzó más en mí la idea de que este año trabajaré por estar en Sevilla 2015, que ninguna carrera se me cruzará y que mi sueño se hará realidad en febrero si todo sale como tiene que salir.
Todo esto en una semana en la que salir a entrenar ha sido difícil, estoy acostumbrándome a entrenar en el gimnasio y me da pereza, hasta Elena me ha llamado la atención porque ya no salgo a correr... De hecho solo he podido hacer 5 kilómetros el sábado y 6 el domingo, aunque a decir verdad he hecho cinco días deporte en la semana. Poco a poco iré poniéndome a tono, de momento el objetivo de bajar peso está resultando. Lo primero e importante es soltar lastre, después ya meteré volumen de kilómetros.
El 2015 será mi año, correré una maratón cuatro meses antes de cumplir los 40.

3 comentarios:

  1. por supuesto yo te animo y se por lo que pasarias yo fui testigo de tu paso por el turdetania y se la sensacion de ese fuego que te quema por no estar donde debieras pero estoy seguro que en 2015 estaras en nuestras filas como maratoniano animo y cumple un sueño no hay nada mejor

    ResponderEliminar
  2. Pues allí quiero verte, es casi seguro que sea de la partida en 2015 y me harías un feo si no te veo con el dorsal puesto.

    Avisado quedas, tienes un año ;)

    ResponderEliminar
  3. Un gran detalle que estuvieras animando. En 2015 tu estaras en el otro lado y seran otros los que animen, ojala! Y quiza hasta nos veamos, que me ha gustado mucho la maraton de Sevilla y ya estoy pensando repetir.

    Muchas gracias por la mención ;-)

    ResponderEliminar