martes, 5 de noviembre de 2013

Si Pamela puede con sus tetas... ¿por qué yo no con mi barriga?



Mi quimera, la auténtica, la de verdad no una quimerita cualquiera sino mi BHAG, mi nirvana, mi Shangri-La deportivo es, y lo voy a decir, hacer un triatlón de larga distancia (Ironman, Challenger, Iberman, Trisur... todas ellas marcas registradas).
Si vamos a la definición de quimera encontramos:

quimera
  1. Ilusión,fantasía que se cree posible,pero que no lo es:
    en lugar de actuar,se pierde en quimeras.
¿Cómo que no lo es? Eso habrá que verlo.
Me sorprendío ver al cocinero Gordon Ramsay en el Ironman de Hawaii, recuerdo que hasta saqué una foto al iPad en el que estaba viendo la prueba y la envié por whatsapp, me pareció increible. Este fin de semana se ha celebrado el maratón de los maratones el más mediático, el de Nueva York y sabes ¿quién lo ha terminado? Pamela Anderson. Uno se pregunta, si Pamela termina el maratón con sus dos mochilas por qué no puedo hacerlo yo con mi cargamento lipidinoso.
Mi mochila es grande, calculo que corro con un sobrepeso de unos quince kilos. Actualmente estoy de nuevo en 85. Y la Turdetania la correría con unos 83. Creo que mi peso ideal estará en torno a unos 72. Correr con tanto peso se nota, sino prueba a correr con dos cajas de media docena de tetrabricks de leche, eso es lo que yo hago cuando entreno. Claro, así estoy machacando mis articulaciones.
Yo sé que puedo terminar una maratón, lo sé. No tengo la certeza de que algún día termine un Ironman, eso es otra cuestión. Sé que este domingo terminaré la media maratón de Dos Hermanas, lo sé. Pero la cuestión es: cómo la terminaré.
Ayer salí a entrenar y de nuevo sentí pinchados en la rodilla izquierda y eso que solo completé cuatro kilómetros, el domingo serán ¡¡21!!
Yo no me apunté a esto para sufrir, sino para disfrutar.
Esta situación en la que lo estoy pasando mal, me hace replantearme objetivos y fijarme metas sensatas. Por supuesto que acabaría la maratón de Sevilla el próximo 23 de febrero, como me lo había propuesto. Incluso por debajo de las 5 horas 41 minutos que hizo la Anderson con sus dos tetas, incluso creo que bajaría de las 4 horas. Pero para qué hacerla si tengo la certidumbre de que voy a sufrir durante el recorrido y después voy a estar unas dos o tres semanas (como ahora estoy) con dolor de articulaciones.
Por tanto me tengo que fijar un objetivo claro, que me catapulte a la consecución de otro más exigente.
Tengo que estar al menos en 75 kilos cuando inicie mi plan de entrenamiento de doce semanas, ayer encontré uno en Foro Atletismo que me gusta bastante.

La cuestión se fundamenta en:

  1. Efidencia: Descartar correr Maratón Sevilla 2014
  2. Objetivo primario: Adelgazar hasta menos de 80 kilos el 30 de diciembre de 2013.
  3. Reto: Si ese día estoy por debajo de los 80, me inscribo en el Maratón Martín Fiz.
  4. Meta: 17 de febrero de 2014, estar en 75 kilos (o menos) e iniciar semana 1 de plan de entrenamiento.
  5. Quimera: hacer en menos de 3 horas 40 minutos, los 42.195 metros del maratón de Vitoria-Gasteiz el 11 de mayo de 2014.


Entonces mi quimera, la auténtica, la del Ironman, lo será aún menos porque habré reconfigurado su significado ese día en Gasteiz, para mí quimera será: Ilusión,fantasía que se cree posible,pero que finalmente sí lo es.

Por cierto, así acabó Pamela tras correr la maratón de Nueva York: